Esta es la crónica que Fernando Nuin ha elaborado de su participación en el Ironman de Vitoria-Gasteiz. ¡Disfrutadla!
CHALLENGE VITORIA 2013
28
de julio del 2013 – Triatlón distancia IronMan (3.8+180+42.195)
Dicen que la
diferencia entre un sueño y un objetivo es precisamente que un objetivo es un
sueño con fecha determinada y los sueños sin embargo muy rara vez se cumplen
por sí solos. Nosotros, los deportistas, tenemos la buena costumbre de marcar
objetivos dando un paso más allá para dejar de soñar y conocer la realidad.
Hace más de un
año decidí volver a tomar parte en una prueba de distancia Ironman, o mejor dicho,
le puse fecha ya que lo tenía decidido desde el segundo dos después de acabar
Niza en el 2010. Roth (Alemania) era la opción más interesante para acabar este
ciclo deportivo en mi vida. Preparar esta distancia requiere mucho compromiso y
una vida muy especial. Por suerte, tanto entrenar como esta vida deportiva me
encanta y no me crea gran problema, pero el cuerpo tiene sus “límites”.
Finalmente, por diferentes motivos se trunca la opción de Roth y
Challenge-Vitoria me acoge como a un profesional, gracias Iñigo.
El
día amanece perfecto. No hay viento y el agua está perfecta, en calma y con
buenísima temperatura. Tras las típicas charletas de última hora con los
Hirukis participantes y los que han ido a animar encaramos la salida, me
corresponde salir a las 8:15, 15’ después de los pros. Ahí está Xabier, de
Zumaia, ya un amigo después de coincidir en varios Zarautz. Xabier quiere bajar
de 12h para mejorar su marca de Zurich. Le deseo mucha suerte. Yo también
quiero mejorar mi marca de Niza. ¿Quién no se ha marcado un objetivo más o
menos real? Yo soy más ambicioso, quiero estar cerca de las 11h y no más de
11h30’. ¿Estoy preparado?. Foto de rigor y a esperar la salida.
Cada
año nado más lento. No encuentro gran motivación en mis entrenos y sólo trabajo
la resistencia. Sé que voy a acabar sin apenas notar el esfuerzo pero seguro de
mi tiempo va a ser discreto. El recorrido es una “L” gigante, la 1ª recta tiene
1400 m y varias boyas a dejar a la izda. En mi natación no existe la línea
recta, con las gafas empañadas tengo que corregir constantemente la
trayectoria, como no somos muchos para los 500 m nado sólo sin golpes ni
problemas. Giro a la izda y sigo igual o peor que antes. Nuevo giro a la
izquierda, decido quitarme las gafas para desempañarlas, ahora con el agua que
me ha entrado empiezo a ver las boyas. Parezco un principiante pero qué se le
va a hacer. Giro a la derecha para pasar entre dos boyas y encarar el último
tramo, ahora voy mejor, pero me doy cuenta de que no ha ido muy bien este
segmento. Llego al embarcadero y el tiempo lo deja claro, 1h23’40’’, he pasado
mi peor segmento y rápidamente a por la bici.
Transición
ultra rápida comparada con Niza (13’), cojo la bolsa, me quito el neopreno
sentado. Voy a hacer la bici sin calcetines, considero que es mejor hacerlo así
ya que siempre se humedecen por ir nosotros mojados o pisar zonas mojadas e
intentar que los pies no se reblandezcan. Recojo todo y en 3’02” ya estoy
pedaleando. Tras unos metros para ver que no me mareo me acoplo para dar pedales
con ganas. Este año he entrenado muchísimo el fondo, he hecho más kms que
ningún año, alrededor de 4000-4500 kms. Varias salidas de 140 kms sólo, con el
Eguesibar 2 salidas de más 200 kms (Quebrantahuesos e Ibardin), y varias de 160
kms. Confío mucho en mis fuerzas. Intento ir siempre al menos a 140 ppm para
mantener un ritmo que me haga ir a 30 km/h de media. El comienzo es rápido y la
mayoría vamos fácil. Después de Salvatierra me cruzo con el grupo de Susana y
Josemi que han ido animar y a aprovechar la mañana para dar un paseo en bici.
Tras 50 km la media es de 30.5 km/h, estoy en el objetivo. En el tramo
Salvatierra-Vitoria empieza a notarse el viento racheado, son 25-30 kms de
nacional abierta y pestosa. Tras la presa, primera parada a descargar ya que
tengo la vejiga a rebosar. Doy la primera vuelta, 63 kms, en 2h 3’ y a por la
segunda vuelta de las tres que son en total. Voy acoplado y a gusto. Este
primer tramo es muy bonito y con viento a favor (me lo imagino claro ya que eso
no se nota mucho), acoplado disfruto de la bici y un poquito del paisaje. Tras
el giro a la derecha para encarar Salvatierra compruebo lo que iba a ser lo
peor del día, el viento. No obstante es un viento “raro”, va y viene. Nuevo
giro a derechas cara a Vitoria y ahí sí que se ve el viento. Los campos se
mueven al ritmo del viento y a mi se me acaban las ganas de ir acoplado. Busco
cadencia alta y empiezo a pensar en que no voy a bajar de las 6h en bici ni por
el forro. Me entra un poco de mala ostia y a sufrir, en estos casos siempre
busco cadencia y ppm olvidándome de velocidades. Ya estoy otra ven en Vitoria.
Ahí veo a Gorka Bidegain, recién venido de Roth, que me chilla como un
descosido y me da subidón, se agradecen los ánimos en estos momentos, eskerrik
asko. Remonto la presa y segunda parada técnica. Elijo el mismo sitio que
antes, más que todo por no parar antes y enseguida culmino la segunda vuelta.
Me ha costado 2h 7’, sólo 4’ más que la primera, pensaba que lo había hecho
bastante peor así que me vuelve a dar otro alegrón. Nuevamente acoplado intento
recuperar tiempo en el tramo favorable antes del giro a la derecha cara
Salvatierra. La tercera vuelta es un calco de la 2ª. Quizás algo menos de
viento o más lateral diría yo. Si hasta ahora he adelantado a bastante gente empiezo
a perder 8-10 posiciones pero yo ya estoy pensando en los 42195 m. Busco
cadencia, comer y beber bien antes de bajarme de la bici. Empiezo a repasar la
transición para hacerla lo más rápido posible. Como siempre, con muchas ganas
de dejar la bici y con fuerza que es de lo que se trata en este tipo de
carreras. Atravieso Vitoria lo más rápido posible y veo que no ando lejos de mi
objetivo, hago cálculos mentales y creo que estoy muy cerca, al final 6h2’34’’.
Si descuento las 2 paradas técnicas…. Transición a lo profesional, me recogen
la bici y a por las zapatillas.
Nuevamente
2’58” (en Niza tardé 12’) para embadurnarme los pies de vaselina, ponerme los
calcetines y las zapatillas, recoger las cosas y colgar la bolsa. Salgo a la
calle con la crema de sol en la mano. Hago el primer paso por la plaza de
España que está abarrotada y saludo a varios conocidos. Intento mantener
pulsaciones por debajo de 150 ppm pero es imposible, voy a 165 ppm pero es lo
que hay. Me doy crema de sol en marcha y antes del primer avituallamiento ya he
acabado. Tomo líquido sin parar y llego al km 2. Voy a 4’50’’ y nuevamente
subidón. Llego al km 5 y sigo al mismo ritmo, voy fácil, conteniéndome pero
asustado por que no bajo de 165 ppm. Me han dado 3 ó 4 pinchazos en la rodilla
derecha. No sé lo que es ya que nunca me había pasado. Sí que en la bici notaba
algo de vez en cuando pero dependía de si abría o cerraba más las piernas, es
un tema a mirar. Por suerte, no vuelvo a notar nada en toda la carrera a pie.
En el primer bucle me cruzo a Mikel e Ibai que van por delante. Pienso que van
en la 2ª vuelta como unos tiros. Sigo fácil hasta que alcanzo a Mikel antes del
fin de la 1ª vuelta. Cuando me dice que es también su 1ª vuelta no me lo puedo
creer, en Zarautz anduvo por delante mía con mucha fuerza. Lo dejo fácil y hago
la 1ª vuelta en menos de 52’. Los hirukis me animan para seguir a este ritmo ya
que tengo a Ibai por delante pero no muy lejos. Intento templar ese ánimo y
pienso que si ha de caer ya caerá, sigo en mi ritmo, voy fácil, en todos los
entrenos que he hecho a partir de la hora es cuando más agusto he estado y aquí
me pasa lo mismo. Empiezo a andar en los avituallamientos para beber tranquilo,
a mi gusto, está todo demasiado junto y no me da tiempo a beber agua antes de
que llegue el isotónico (recuerdo que en Niza no me hacía falta andar para
tomar todo), por lo tanto, de aquí en adelante se repite la tónica en todos los
oasis (avituallamientos), andar para beber y 1 gel en cada vuelta, intento
comer algo de sandía y plátano pero no me pasa así que decido no comer más
sólido. Bebo coca-cola, nunca bebo coca-cola pero como dicen que viene bien me
aficiono y la verdad es que entra fácil. Lo que sabe muy rico y fresquito son
las sales de Infisport que nos dan en el bucle, tomo dos vasos en todas las
vueltas. Los geles también son muy
agradables y al ser tan pequeños en 2 segundos se toman y casi no hace falta ni
agua. Ya he pasado a Ibai, va bastante mejor que Mikel, Ibai no para de
animarme cada vez que me ve, al igual que la cuadrilla de amigos de Mikel e
Ibai que han venido a verles. He visto a Javi Nuñez con su txapela naranja,
creo que va bien, me saca al menos 3-4 kms, esto es un abismo en una IM así que
me alegro de que le vaya bien a pesar de sus dudas. De repente veo a Virginia y
mis hijos Lexuri y Oier, acababan de
llegar, les saludo, les digo que voy muy bien y sigo. Creo que me cruzo con
Javier Elizari en esta 2ª vuelta, no sé muy bien como va pero siempre está ahí.
Le doy ánimos. Completo la 2ª vuelta. De tiempo voy algo más lento pero me veo
perfecto. Gorka viene detrás (me saca una vuelta) y pasamos por la plaza de
España seguidos. En la 3ª vuelta comienzan las dudas, sé que de aquí en
adelante puede pasar de todo. No obstante, no hay bajón en especial, los avituallamientos
un poco más lentos al igual que el ritmo pero estoy encantado. Empiezo a echar
cálculos y voy según lo previsto (bajar de la 3h 40’-45’ en los 42195 m). Esto
me hace sentir muy bien, sigo adelantando a triatletas constantemente, lo he he
hecho desde el km 0 y eso me indica que no entreno tal mal a pesar de no ser muy sistemático ni metódico en mi
preparación y sobre todo que conozco mis ritmos a la perfección. Junto a la
Catedral está Txitxo y G. Bidegain que me animan y les hago el gesto de que
sólo me queda una vuelta, “esto está hecho”. Antes de acabar la 3ª vuelta me
cruzo con Gorka que no le queda nada, un gran tiempo para él. Inicio la 4ª
vuelta y cometo mi primer fallo, no sé si tuvo algo que ver en el desenlace
final, paso el avituallamiento y no cojo gel, sí que bebo pero llevo casi 1
hora sin gel, decido cogerlo en el siguiente. Tomo gel en el siguiente pero a
falta de 7-8 kms me entra flato. ¡Cómo odio el flato!. Me duele bastante y como
sé que andando se pasa comienzo a caminar y a correr, los famosos cacos, hago
todo lo que dicen que hay que hacer pero no hay forma de que se vaya el flato.
Cada vez que corro aparece. Me mando mensajes positivos y así poco a poco pasan
los kms. Nuevo cruce con Javi Nuñez que no le quedan ni 5 kms. Los oasis cada
vez más lentos, veo que mi objetivo de los 42195 m se va al garete pero sí que
acabaré por debajo de las 11h30’ que era el “menos buen” tiempo esperado en mis
predicciones. A falta de 3 kms corro sin parar sufriendo el flato, ya sólo pienso
en acabar y descansar todo agosto. Julio ha sido muyyyyy largooooo, mucho calor
y malas sensaciones en los últimos entrenos. En junio estaba a tope y con mucha
moral y tengo claro que en Roth hubiese estado en mejor forma pero es hora de
pasar página. Últimos ánimos de la familia. Lexuri y Oier con vergüenza no
quieren entrar conmigo en meta así que tras la plaza de los fueros y comprobar
que a algunos les quedaba otra vuelta encaro la meta, levanto los brazos con
mis últimas fuerzas y ya soy Finisher, 11h 24’ 45”. Iñaki que había estado todo
el día animando me hace la foto de rigor y me derrumbo, estoy muy muy cansado,
apenas veo a Susana y Josemi que me gritan, e intento comer para recuperar.
¡Hay tortilla de patata!. He soñado con ella mientras corría, he pasado algo de
hambre en la carrera, también hay pasta, bocadillos, ensalada, como y bebo lo
que me deja el cuerpo. Llega Virginia y los críos y ya empiezo a sentirme mejor. Un poco de masaje,
un buen café, recoger todo y a casa. Algún día
volveré a hacer IM aunque no sé los años que pasarán. Es hora de volver
a soñar.
Toda la
organización pasa con notable alto, no faltó personal en ningún sitio, los
avituallamientos siempre bien atendidos, el recorrido bien señalado, tanto kms
como dirección, los voluntarios hicieron su labor, a destacar lo duro que tuvo
que ser el estar en los múltiples cruces del recorrido de bici durante tantas
horas. Como posible pega sería que no había control de tiempo en las vueltas de
la bici y sólo uno en el recorrido de los 42195 m, más que todo para nuestra
curiosidad personal. Y como mejora sería que los avituallamientos estuvieran
más separados entre el agua, isotónico, gel y barrita, plátano etc...a mi gusto
un poco juntos, esto tanto en el recorrido en bici como a pie.
Recorrido:
El entorno y
el pantano para la natación es inmejorable, yo prefiero dar dos vueltas y que
las boyas estén más juntas para no perderme tanto pero es cuestión de gustos.
La mayoría hizo muy buenos tiempos así que no hay excusa.
El recorrido
de bici tiene dos mitades a diferenciar. La 1ª que va desde la salida de
Vitoria hasta Salvatierra. Esta zona es amena con carreteras entre pueblos y
bastante llevadera. Son carreteras más pequeñas y excepto la pequeña subida de
la presa bastante llana con ligeros toboganes. La 2ª desde Salvatierra a
Vitoria, antigua nacional, muy ancha, con edificios dejados de vez en cuando y
toboganes más pronunciados es menos atractiva. En esta ocasión al haber viento
se hizo poco agradable y pestosa. A pesar de todo, recorrido muy rápido ya que
la media que hice yo rozó los 30km/h, algo impensable para mi en cualquier zona
de entreno habitual de la comarca.
El recorrido
de los 42195m fue una grata sorpresa, quizás lo mejor del día. Mucha sombra,
entorno privilegiado, mucho parque y carril bici en muchos tramos, salvo la
zona final del bucle no noté apenas el sol. Poco que cambiar.
En cuanto al
tema de los espectadores gran sorpresa, mucha gente animando, reconozco que
bastante más de lo que esperaba tras no ver a nadie el sábado por la tarde en
Vitoria (igual fue por la hora), y sobre todo por haber aparcado tan fácil.
Había zonas con poca gente pero es normal.
Impresión personal de mi prueba:
Me queda una
pequeña espina clavada por no haber nadado mejor, no bajar de las 6 horas por
el dichoso viento en la bici y casi lo que más me ha dolido es no bajar de los
225’ en los 42195 m ya que me veía capacitado para lograrlo. No obstante, la
verdadera realidad es que, “sufrir” sólo en los últimos 8 km de una prueba IM,
los firmaba ahora mismo antes de empezar yo y creo que cualquiera.