29_07 Campeonato del Mundo Vitoria-Gazteiz

  Puedo decir que esta temporada ha sido la más dura y a la vez la más gratificante de mi larga vida deportiva, el objetivo del mundial de Vitoria-Gazteiz parecía no llegar nunca, con el tiempo para entrenar más escaso que nunca los sacrificios personales se veían multiplicados, a eso se sumaron las tres lesiones (2 esguinces y una rotura de fibras) y las dos caídas con la bicicleta. La moral se resentía y aun más después del caótico resultado en el triatlón de media distancia de Madrid. El abandono de mi objetivo final estaba casi decidido, pero el apoyo de mucha gente, me hizo ver las cosas de manera más positiva y ese momento pasó a ser el punto de inflexión.
  Por fin llego el gran día, un día que amaneció frio y gris, me desperté muy nervioso como si fuera mi primera carrera, había costado mucho llegar hasta aquí. Sabía que muchos de “mis txikis” del Triatlón Antsoain iban a estar en la salida conmigo. Antes de la salida entre la gran cantidad de gente que está por las campas de Landa, les vi, entonces para mí el día cambio y se torno cálido y despejado, supe que ese era el día.

  Con más de 1.200 participantes el ambiente era impresionante y por fin llegó el momento, entre la multitud se veía la gran pancarta con mi nombre que habían traído “mis txikis” y sonó la bocina. La natación a una vuelta, era un inmenso cuadrado de 4000 metros, no se me hizo especialmente larga 1h 8’ 23”, salí en buena posición en mi grupo de edad y corriendo a por la bici, nos esperaban 2 vueltas a un circuito bastante llano con algunos repechos. Por momentos sobre el acople me acordaba de toda la gente que había venido a apoyarme y en todos los que lo hacían en la distancia, la emoción era indescriptible. Al final 120 kilómetros en 3h 27’11” buena media y conservando al final las piernas para la carrera a pie, donde lo quería dar todo y disfrutar lo más posible. En la carrera a pie por el centro de Vitoria-Gasteiz el ambiente era impresionante, muchos amigos y conocidos de Pamplona me animaban a lo largo de las cuatro vueltas que se daba al recorrido, entre todos me llevaban en volandas, a pesar del buen ritmo que llevaba no me costaba correr y disfruté como nunca lo había hecho. No soy capaz de explicar mis sentimientos en esos momentos. Comencé a 4’00” el kilometro y así acabé, ritmo constante saludando a mis amigos, disfrutando con ellos, al final 30 kilómetros en 2h 00’ 38”.
  Cruce el arco de meta con la vista puesta en la grada, donde estaba mi afición, mis txikis, con sus pancartas. No miré el crono, no sabia mi puesto, sabía que había hecho una gran competición, pero eso quedaba en un segundo plano, levanté los brazos saludando a la grada como si hubiera ganado. Al final 6h39’44” (12º GE 40-44).
  En un año tan complicado, en Vitoria-Gazteiz pude disfrutar de la que creo ha sido una de las mejores experiencias deportivas de mi vida y esto ha sido gracias a todos lo que habéis estado apoyándome en los buenos y en los malos momentos.
  Muchas gracias a todos.
  Iñaki Marsal.